Ruptura de Meniscos
El menisco, es una de las partes de la rodilla más comúnmente dañada. Cada rodilla tiene dos meniscos, son estructuras dentro de la articulación, entre los huesos de la tibia y el fémur, tienen forma de herradura.
Funcionan para disminuir el choque entre los huesos, distribuir la carga del peso y ayudan a la estabilidad.
Se pueden romper en jugadores de fútbol americano y otros deportes de contacto como fútbol soccer, baloncesto, deportes de raqueta y pista y campo, esto pasa cuando se realiza un movimiento de rotación del miembro con el pie fijo en el suelo, o en la posición de cuclillas, se puede asociar a la lesión de ligamentos; también es frecuente que se rompa en personas que tienen ruptura del ligamento cruzado anterior, por la inestabilidad de la rodilla, todas estas son rupturas traumáticas. En adulto medio y adulto mayor puede haber ruptura sin necesidad de algún trauma, o por un trauma leve, esto por debilitamiento y adelgazamiento del menisco, estas son rupturas degenerativas.
Las rupturas pueden tener diferentes formas:
- El atleta joven puede tener una ruptura longitudinal o en “asa de balde”, si el fémur y la tibia aplastan al menisco.
- Menos común, en el atleta joven es ruptura llamada radial o en “pico de lora”, en donde el menisco se divide en dos direcciones debido a actividades de estrés repetido como correr.
- Las rupturas de meniscos pueden ser lesiones asociadas a otras lesiones de ligamentos, como la ruptura del ligamento cruzado anterior.
- También las rupturas de meniscos pueden tener lesiones asociadas como las lesiones del cartílago articular.
- En persona mayores, la degeneración del cartílago por artrosis o desgaste, causa una ruptura horizontal, o varias lesiones pequeñas.
Signos y síntomas
Puede sentirse una sensación de chasquido cuando se rompe el menisco, la mayoría de la gente puede caminar con la rodilla dañada y algunos incluso jugar. Con el tiempo se instauran los síntomas de inflamación, la rodilla se siente dolorosa y tensa, por varios días el paciente tendrá:
- Inflamación y cierta rigidez
- Dolor en la línea de la articulación
- Aumento de líquido dentro de la rodilla (derrame de líquido)
Sin tratamiento, un fragmento del menisco puede moverse, dando la sensación de que algo se desacomoda dentro de la articulación, además cuando la parte rota se coloca entre los dos huesos, interfiere el movimiento normal de la rodilla, pudiendo tener episodios de bloqueo articular (esto es que no puede extender totalmente la rodilla sea en forma activa o pasiva); dolor repentino por pellizcamiento, o aumento del líquido sinovial. Si usted piensa que puede tener una ruptura meniscal, visite a su medico para que le diagnostiquen la molestia y le individualice el tratamiento.